18/2/13

17 FEBRERO 2013. CUERDA LARGA



TRAVESIA DE CUERDA LARGA CON ESQUÍS, EL ESQUÍ DE LO ABSURDO

Empece la travesia, al reves como hago todos los años, desde Morcuera ,en vez de por Cotos o Pto. Navacerrada  intentando huir de la aglomeración y los aparcamientos saturados, allí empezo mi primera decepción no había nieve. Por lo tanto, tuve que acarrear las tablas  por los canchales de la norte de la Najarra esperando, como otras veces me ha pasado, que en la achatada cumbre de la Najarra hubiera suficiente nieve para foquear sin grandes problemas. Lo que encontre en la línea cimera fue más descorazonador el fuerte viento barrio toda la nieve de arriba y toda ella estaba fundiéndose en la zona sur del Hueco de San Blas a sotavento donde se había acumulado. Bueno siguiendo con mi trekking con las tablas a la espalda baje al collado de Najarra y allí si puse rumbo  a Bailanderos  y aquí si poder ponerme las tablas y foquear hasta la cumbre. Bajar de Bailanderos otra vez tuve que quitármelas y bailar entre las piedras “bailanderas” por los estrechos vericuetos de la cara noroeste emulando a los esquiadores  de las competiciones de esqui de travesia en los tramos chungos de aristas escabrosas, Lo tomaré como un entreno. En el collado de “Pedro de los Lobos” Por fín, me pude poner las tablas de forma constante subiendo hacia Asomate Hoyos por una nieve dura pero con una película de nieve primavera por el lado sur. Tambíen con gran envidia se podría hacer una bajada memorable  por el terraplen del nacimiento del arroyo Aguilón  por el lado Norte pero hoy no tocaba. Tras llegar a Asomate Hoyos otra vez  bajar conectando con zonas de nieve por la loma del Pandasco se nota que aquí tambien el viento ha hecho de las suyas…Tras llegar a la Peña de los Pastores esta delante de nosotros el gran domo de Cabeza de Hierro Mayor, con gran cantidad de nieve, aquí protegido por la cumbre ha permitido una acumulación aceptable subo por el lado suroeste buscando los tramos más insolados donde haya derretido un poco la placa de nieve dura que amenaza por su lado septentrional. A pesar de algunos tramos de monocapa de nieve primavera me tengo que poner las cuchillas. Tan dura estaba que a veces la cuchilla no muerde totalmente la capa y voy subiendo como si llevase botas de plataforma. De todas formas, no era peligroso porque las cuchillas mordían lo suficiente.  En la cumbre sopla el viento y todo es cristal sin quitarme las cuchillas bajo el collado entre las dos Cabezas y llego hasta la cumbre de Cabezas de Hierro menor , la antipática cara oeste se compensa con la amable cara este y protegido por la cumbre de laCarabina y del Escaleron por la Divisoria del arroyo de Valdemartín. Me quito las pieles y bajo hasta el collado de Valdemartín. Aquí esta bajada recompensa todos los esfuerzos anteriores. Nieve dura transformada con finas bandas de nieve en polvo, algo transformada, y una película de nieve dura blandecida por el sol que hace que agarren bien las tablas hacen de este Valle una de las bajadas más bonitas del Guadarrama. Me tienta no seguir la cuerda y dejarme bajar siguiendo el arroyo de Valdemartín hasta el puente de los Manchegos y allí Díos dirá. Pero mi sentimiento masoquista prevalece y me pongo otra vez las  pieles para llegar a Valdemartín . Con la seguridad de la nieve blandecida y las bandas de nieve en polvo subo con seguridad hasta llegar al interminable repetidor de la Cumbre. Allí, se rompe la magia de la Cuerda por las infraestructuras de la estación de Valdesquí  y bajo paralelo a la pista   de la estacion con nieve helada con rosetones. En el collado de Bola del Mundo foqueo y desde esta “estación polar  castiza” vuelo hasta mi meta primero por la carretera  hasta el restaurante con nieve helada y después, como premio final, por mi fidelidad por seguir la cuerda por la pista, con nieve pisada, que va paralela al remonte de Guarramillas hasta el Puerto.

Félix Sánchez Constela

1 comentario:

  1. Por razones de la informática que desconocemos no hemos podido incluir la introducción que nos envió Félix, así que la ponemos como comentario:
    Esquiar fuera de pista por el Guadarrama es casi una utopía que por desgracia cumplirla es cada vez es más difícil
    Por la dura climatología que tenemos en el centro de nuestra “Piel de Toro”. Cuando hay frio, no hay precipitaciones y el fenómeno de la inversión térmica nos hace malas jugadas con el precario manto nivoso que tienen nuestras cercanas y queridas montañas y cuando hay precipitaciones no hay frío y la lluvía nos rompe muchas veces nuestras esperanzas de rayar nuestras tablas por las laderas de nuestro Guadarrama…
    Si es un acto casi heroico esquiar por nuestras montañas realizar una travesía con tablas de esquí de montaña es un acto que ya está dentro de lo “absurdo” y que por ilógicas razones seguimos intentándolo a pesar de la realidad tenaz que nos demuestra lo contrario de nuestras expectativas.
    Si además la travesía supone Cuerda Larga, una cuerda meridional, que es la última que recoge las precipitaciones de los frentes del Noroeste y que la proporción de bajadas y subidas tampoco sale un saldo razonable para un esquiador de travesia convencional o que tenga suficiente sensatez.
    ¿Entonces por que seguimos haciéndola año tras año?. Podríamos contestar como Mallory cuando intentaba escalar el Himalaya un periodista le pregunto«Vosotros, ¿por qué subís a las montañas?» y el replicó: «Porque están ahí….» . Yo si tengo que verbalizar algo sobre esta travesía sería algo parecido. Cuerda Larga su estela blanca lejana pero siempre presente en nuestros infantiles inviernos madrileños siempre ha estado hay y recorrerla no sólo es un viaje o una actividad deportiva pequeña sino un ejercicio de recuerdo y de nostalgia….

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